lunes, 24 de octubre de 2011

Finding Neverland


Montar un musical requiere de una gran cantidad de trabajo. Desde actores hasta publicidad, pasando por audio, iluminación y vestuario, cada área requiere de personal especializado que sea capaz de hacer que la ejecución final sea fluida y exitosa. Tal es el caso de Peter Pan, producción que, además de revivir la clásica película de Disney, se enfrenta al gran reto de efectuar escenas de vuelo y efectos especiales de la manera más espontánea posible para regalarle al público 120 minutos en el tan anhelado país de Nunca Jamás.
Para entender como es que lo anterior sucede, tomamos un recorrido por el backstage de la producción, guiados por el stage manager. Empezamos en el cuarto de pelucas, que son un elemento crucial para la caracterización de los personajes. Debido al movimiento que realizan los actores durante su tiempo en escena, es muy importante que el peinado de la peluca no se deshaga o despeine, por lo que éstas se meten en un horno alrededor de siete horas para después acomodarlas en las cabezas de los actores. 
A pesar de que hay una maquillista para ayudar a la caracterización de personajes, todos los actores, a excepción de los niños más pequeños, han aprendido a maquillarse solos, por lo que no se necesitan a muchas personas en esa área. Otro aspecto bastante interesante es que todo el maquillaje que se vaya necesitando es provisto por MAC a cambio de publicidad impresa en los programas de mano del musical. Lo anterior es una parte muy importante de la financiación de la obra, ya que Ocesa, aún siendo una compañía con bastantes recursos, no podría hacer toda la inversión y la producción no sería un negocio. Otros patrocinadores son Ciel, Telmex y Banamex.
Proseguimos al cuarto en donde se acomodan y conectan los micrófonos de los actores a las bocinas del teatro. Estos son muy pequeños y se colocan en la frente por ser el mejor lugar para captar el sonido de la voz, no en la mejilla o en el pecho, como se acostumbra en algunas obras. Aunque los actores prueban sus micrófonos antes de salir a función, hay una persona que se queda en la cabina controlando los volúmenes de las voces y que está pendiente de cualquier falla que se pueda dar, comunicándose a través de un chat con las personas controlando las demás consolas. 
La parte que considero más impresionante de la producción  es el sistema de vuelos que se maneja. Éste consiste en una serie de poleas de varias cuerdas que son operadas a mano durante todo el tiempo que el actor que trae el arnés puesto está en el escenario. Hay distintos tipos de cuerdas que permiten mover de manera más efectiva al actor, dependiendo de que tan rápida se desee la elevación y el desplazamiento. Los arneses tienen un precio de dos mil dólares y se cuentan con cuatro en total, pues ese es el número más grande de personas volando simultáneamente. Estos se aseguran en la pelvis y en la espalda y después a los cables de las poleas a través de orificios a los lados del vestuario. Para poder manejarlos de la mejor manera posible y no provocar que los actores se atoren, se trajo a Paul Rubin, diseñador de vuelos para musicales de Broadway como Wicked y Peter Pan,  para que realizara las coreografías de vuelo, lo cual tardó, solo en montarse, cinco semanas.
Además de los vuelos, la escenografía juega un papel importante en la creación de la atmósfera de la obra. El barco de Garfio, la habitación de Wendy y la guarida de Peter son los principales lugares en donde se desenvuelve la historia. Todos fueron fabricados en los talleres de producción y son movidos por los técnicos que se encuentran detrás del escenario hasta unos rieles que los acomodan automáticamente dentro del escenario. También, para simular el agua, hay unos fragmentos de pantallas y luces que se levantan del piso del escenario, creando diferentes dimensiones y haciendo que el agua y el nado de las sirenas o la proyección de Campanita se vea bien logrado. 
Siguiendo la intención de utilizar a la menor cantidad de personas posible, la orquesta está formada por ocho músicos en total. La música principal es en vivo, pero hay sonidos y efectos previamente grabados por los mismos músicos, que también les sirven de guía en las funciones. 

El personaje de Peter Pan es interpretado por Lola Cortes. Al principio podría parecer un poco extraño y fuera de lugar que una mujer haga el papel de un niño, pero la verdad es que lo hace de manera excelsa. La preparación invertida en todos los aspectos del personaje es bastante clara y digna de apreciación. Sus movimientos están perfectamente caracterizados como los de un niño y su voz, al cantar y hablar, suena igual durante toda la obra. A pesar de no ser muy joven, Lola se ve tremendamente atlética al volar y moverse en el arnés, ya que, además de todo, hay partes de la obra en las que está cantando mientras está moviéndose de cabeza. Físicamente, se prepara con la atuendo verde y las botas que son particulares del personaje, además de una peluca de cabello castaño claro y corto. Su maquillaje facial es como el que se necesita para destacar todos los rasgos ante el público y tiene manchas cafés en los brazos y piernas que hacen que se marquen los músculos de manera un tanto masculina.



Es grato ver que el teatro mexicano cuente con las herramientas para dar un espectáculo entretenido y lleno de preparación. Esta no es una producción como cualquier otra porque tiene el deber de crear un mundo ficticio en un escenario, en donde volar, nadar, saltar de un barco o ver a un cocodrilo no sea algo fuera de lo común. Peter Pan logra lo anterior de manera peculiar, presentado algo que no se había visto antes en México y que ha sido muy bien recibido. 


El emporio Televisa


Televisa ocupa un lugar privilegiado en la comunicación nacional mexicana. Por lo tanto, esta empresa tiene una estructura bastante grande y organizada para mantenerse funcionando de manera óptima. Visitamos las instalaciones de San Ángel, en donde se encuentra el CEA (Centro de Educación Artística)  y se realizan todos los programas de entretenimiento, como telenovelas, programas de concurso y farándula.

La primera parada del recorrido fue el set del programa matutino Hoy. Éste se transmite a diario de 9 a 12 en el Foro 16 de las instalaciones. Se cuenta con una sala, un pequeño escenario, una cocina con una mesa al lado y una sala un poco más pequeña que la principal. El inmueble en realidad es bastante diverso, ya que el espacio no es inmenso. Así, las mesas, sillones y sillas son movidos de acuerdo a su funcionalidad para el segmento que se va a transmitir y para mostrar espacios diferentes a la audiencia. La idea del programa es simular luz de día, lo cual es logrado a través de la configuración de la gran cantidad de aparatos de iluminación que se encuentran orientados desde el techo.  Los controladores y prompters del se localizan detrás de las 4 cámaras que se utilizan, igual que las consolas de sonido y la persona que anuncia lo que viene después de los comerciales o en los próximos programas. Debido a que el programa es en directo, no se cuenta con herramientas de edición y post-producción, sino con personas manejando dos computadoras que controlan la programación y que están pendientes de lo que está sucediendo minuto a minuto en caso de algún error o accidente. Además, los encargados de maquillaje y peinado retocan a los seis conductores e invitados durante los bloques de comerciales para mantener una buena imagen durante las tres horas de trabajo. Programas como Hoy necesitan de un buen equipo de logística para llevar a cabo la transmisión de manera amena y efectiva, capaz de resolver problemas al momento y que cuente con conocimiento profundo de las tecnologías disponibles. 

En nuestro camino hacia los sets en donde se graban las telenovelas, hicimos una parada en el foro de La Voz, México, el foro más grande de Latinoamérica. Es también aquí en donde se graban los programas de concurso más importantes de Televisa, como Bailando por un sueño. A pesar de que este foro tiene una estructura principal que se mantiene durante toda la duración del programa, cada cierto tiempo se hacen algunos cambios de luces o se ajusta algún espacio del escenario. La producción del programa combina un poco de la de un programa en vivo y uno grabado, pues al inicio de la temporada los programas eran pregrabados, lo cual dio oportunidad al equipo de cámaras, iluminación y sonido de conocer la dinámica y el funcionamiento del programa para la segunda fase, que sería transmitida en vivo. En este caso, la consola de operaciones no es perceptible por la audiencia y la iluminación es diferente a la de los otros programas, pues está especialmente diseñada para apoyar a las personas que cantan en el escenario y los aparatos no sólo están en el techo, sino alrededor del foro.


Continuando con la visita, ingresamos al set de la telenovela Esperanza del corazón (lunes a viernes, 4:15pm), que trata de la búsqueda de la felicidad de una viuda en contra de la adversidad. El foro está dividido por mamparas de madera en distintos cuartos, que son los escenarios de la telenovela. El floor manager, quien se encarga de que la filmación se apegue al guión y marche bien, nos explicó que las tomas de fachadas ayudan a crear el sentido de locación para la audiencia, pero que, en realidad, casi nunca graban en exteriores y los cuartos son bastante desmontables. A pesar de que cuentan con cuartos fijos durante toda la grabación, el resto puede ser desmantelado en alrededor de una hora y remodelado en dos, dependiendo de las necesidades del setting.


Para ver una grabación, pasamos al set de Una familia con suerte (lunes a viernes, 8:15pm), telenovela que cuenta la historia de un repartidor de verduras que cambia la historia de su familia al salvar a una empresaria de suicidarse. Fue aquí cuando pudimos observar como los sets cobran vida con la iluminación y los actores. Igual que en Hoy, los aparatos de iluminación se encuentran en el techo y éstos también tienen que estar específicamente orientados para lograr luz natural y destacar a los actores. Presenciamos una escena en la que participaron Arath de la Torre, Enrique Rocha, Luz Elena González y algunos personajes secundarios. 
Lograr que un segmento quede grabado a la perfección requiere de mucho trabajo, previo y al momento. Los actores tienen que haber leído el guión y saber lo que tienen que decir durante la grabación. Además, utilizan un apuntador para escuchar las indicaciones del director, que se encuentra en un cuarto contiguo al de la escena supervisando todo. Una vez que se encuentran listos, las lámparas fijas y portátiles son acomodadas alrededor del cuarto. Entre cortes y repeticiones, las personas de maquillaje pueden entrar a retocar a los actores o algún miembro de la producción da alguna indicación técnica para que puedan pasar a lo siguiente. Esta escena se filmó con tres cámaras fijas localizadas en distintos puntos, operadas y monitoreadas por unas quince personas. Adicionalmente, el material es visto por los técnicos de la cabina de post-producción, quienes se aseguran de que el formato quepa en la pantalla de las televisiones. También editan el sonido y, básicamente, ensamblan en capítulo que verán todos los espectadores semanas, días u horas después.
Finalmente, pasamos al departamento de caracterización, en dónde se fabrican todas las pelucas, prótesis y herramientas para heridas que las producciones puedan necesitar. El trabajo en este departamento es arduo, ya que hay mucho modelaje a mano y utilizan algunos materiales bastante duros. Si se va a construir una prótesis o máscara, se hace un molde de la parte del cuerpo del actor, que puede tardar hasta 5 horas en obtenerse. En caso de que la pieza en la que se trabaje tiene algún error, como una burbuja de aire, tiene que repetirse para acercarla lo más posible a la realidad. Hay vitrinas llenas con pelucas utilizadas en distintos programas, cabezas, manos y máscaras como testimonio del laborioso trabajo que este equipo produce.

Tengo que admitir que antes de este recorrido, menospreciaba a Televisa. A pesar de que los contenidos de sus canales no son de mi agrado, me di cuenta de la enorme cantidad de trabajo que se invierte en las producciones. Fue muy interesante darme cuenta de que la organización de la empresa tiene que ser tremendamente precisa para evitar errores en la transmisión y contar con un manejo ideal de personal, infraestructura y programación, que es en donde recae parte de la complejidad de entretenimiento de masas, algo que esta empresa tiene totalmente dominado.